Mantenimiento de los sistemas de filtros en instalaciones filtrantes
En cualquier planta industrial, los sistemas de filtración son piezas clave para garantizar seguridad, eficiencia y cumplimiento normativo. Sin embargo, incluso los mejores equipos pueden perder rendimiento si no cuentan con un plan de mantenimiento adecuado.
El mantenimiento de un sistema de filtración no solo implica cambiar las mangas o cartuchos cuando fallan. Se trata de un conjunto de acciones preventivas y correctivas que permiten alargar la vida útil del filtro, reducir costes energéticos y evitar emisiones inesperadas.
Diagnóstico
Los problemas más frecuentes en instalaciones filtrantes que no reciben el mantenimiento correcto son:
- Alta pérdida de carga: el sistema necesita más energía para aspirar el mismo caudal de aire.
- Consumo excesivo de aire comprimido: limpiezas innecesarias que disparan el gasto energético.
- Roturas prematuras en mangas o cartuchos: provocadas por desgaste, abrasión o falta de protección inicial.
- Emisiones accidentales: humo o partículas visibles en la chimenea por fallos en los elementos filtrantes.
- Paradas no planificadas: derivadas de problemas mecánicos en válvulas, membranas, sistemas de descarga o estructura metálica.
Solución
Un mantenimiento bien estructurado debe incluir tres niveles de actuación:
1. Mantenimiento preventivo
Acciones programadas que buscan evitar averías:
- Revisiones visuales periódicas de mangas y cartuchos.
- Medición diaria de la pérdida de carga (Δp).
- Verificación del estado de válvulas, toberas, membranas y sistemas de limpieza.
- Control de la calidad y presión del aire comprimido.
2. Mantenimiento predictivo
Apoyado en dispositivos de monitorización continua, como secuenciadores de pérdida de carga o detectores de rotura de mangas. Estos equipos permiten anticiparse a fallos, ajustando la limpieza y evitando emisiones incontroladas.
3. Mantenimiento correctivo
Cuando se detecta un problema, la intervención debe ser rápida y eficaz:
- Ajustar la frecuencia o intensidad de la limpieza.
- Sustituir válvulas, membranas o elementos dañados.
- Cambiar mangas o cartuchos de forma planificada (preferiblemente en bloque, no de manera parcial).
Resultados
Un plan de mantenimiento integral ofrece ventajas claras para la planta:
- Mayor vida útil de los filtros, gracias a la prevención.
- Ahorro energético, al optimizar el consumo de aire comprimido y la aspiración.
- Menor riesgo de emisiones, cumpliendo siempre la normativa.
- Reducción de paradas no planificadas, con continuidad productiva asegurada.
- Costes operativos más bajos, gracias a la planificación y al control inteligente.
El mantenimiento de los sistemas de filtración industrial no debe verse como un gasto, sino como una inversión estratégica. Un plan bien diseñado, que combine prevención, monitorización inteligente y acciones correctivas rápidas, garantiza que el sistema funcione de manera eficiente, segura y sostenible durante más tiempo.
En ICT Filtration acompañamos a nuestros clientes con programas de revisión, soluciones de monitorización y asesoramiento técnico especializado, para que cada instalación saque el máximo rendimiento de sus sistemas de filtración.
